Tal
vez la gran virtud del comandante Hugo Chávez Frías como Presidente
de la República Bolivariana de Venezuela haya sido, como ningún
otro en la historia republicana, su tendencia a siempre favorecer a
las mayorías, a los desfavorecidos, a los pata en el suelo
como él mismo se llamaba. Oriundo del llano; (muchos y muchas
conocemos de su nacimiento en Sabaneta de Barinas), se crió con el
ojo sensible puesto en los más pobres, en los desheredados y nunca
olvidó este ejercicio de su espiritualidad. Es por esto que todos
sus proyectos los soñó pensando en el pueblo venezolano, más que
en particularidades, parcialidades, facciones, grupitos o mafias.
Cuando se mira la extensión de las Misiones Sociales que se
desplegaron durante su mandato, vemos a todo un pueblo beneficiándose
de esta inmensa gestión social que levantó a una Patria postergada
por 40 años de bipartidismo cipayo, entreguista y hambreador que
superó en menos de una década índices internacionales importantes.