sábado, 17 de abril de 2021

CONCIERTO PARA UN BARRIO EN GRAVE TESITURA

 





Mi vecina trastornada por el tiempo

anoche se puso a cantar como suele suceder

cuando no se toma la pastilla

Enciende el pasado y canta

Busca su salsa y canta

su ranchera y canta

su bolero y canta

Abraza a Oscar de León entre nostalgias

Se trae a Tony Aguilar entre trompetas

Monta en su tren atosigante al Benny Moré

y se pone a cantar como le gusta

como una contralto inusual 

Ha practicado por años

la sola nota de su pentagrama en grave tesitura

y se lanza sus adorables aullidos

En la sala de su casa

tal vez recuerda ésta o aquella fiesta

mientras celebraban el hervor de la tarde

entre sorbos de alcoholes sonrientes

sumergidos en onomásticos del sol

 

Canta mi vecina sin importarle el apocalipsis

ni los peligrosos dislates de Joe Biden

ni la agria cara de constipado “yo no fui”

del amenazante jefe del Comando Sur

ni los perros de la guerra que ladran

en la frontera andina de su país

ni las últimas estadísticas del coronavirus

aunque cumple las cuarentenas al pie de la letra


Mi vecina apagó el pasado

La calle siguió íngrima y sola sin su voz

La inmensa mascarilla que cubre el barrio

apuró el silencio acosado

Su delirio fue abrazado por el sedante

Su ímpetu huyó a la morada del sueño

Un gallo siguió cantando por ella

marcando el momento de incertidumbres