martes, 7 de enero de 2020

SHEREZADE



Hace dos mil años se habría sacrificado en Roma un toro en el Templo de Marte para aplacar y apelar al Dios de la Guerra. Este fin de semana en el D.C. [Distrito de Columbia], así como con toda seguridad en Tel Aviv, y muy posiblemente en Londres, se abrirán los vinos y licores más exquisitos, sin cuidado aparente de que el sacrificio requerido no se mida en un solo animal sino en millones de humanos muertos y destruidos.
Matthew Hoh



¿Adónde vas mi bella prendida de azahares?
¿Adónde vas preciosa cubierta de satenes?
¿Adónde van tus cuentos fragantes y elevados?
¿Adónde va el sultán que desvelas insomne?

Que los genios destapen las cerradas botellas
Y se impulsen al cielo con aladas alfombras
Que preparen su estruendo al silbido de Abú
Calculando el sentido de atrapar las estrellas

Protejed las compuertas del Estrecho de Ormuz
Protejed sus columnas de oceánica magnitud
Del demente zarpazo imperial y sionista

Tu voz en los milenios sea la paz venidera
Tu voz de aquellos cuentos fortalezcan la unión
Y un enjambre de pueblos elimine la guerra




GAZA



 A Palestina eterna

Alza tu vuelo cada noche al día
Tu cuerpo se expanda a contra fronteras
Canten niños auroras a elevada marcha
Cada pisada una señal de amores combativos

Cada silbido un alerta del viento herido
Del colmillo enemigo en el desierto magro
Vuelvan madres a jardinar retoños
Manos a la azada de hombres imbatibles

Enmudezca el sionismo la iracunda llama
Del voraz corazón pasional amigo
Salta en pedazos del imperio infamia
Y de los pueblos emanen venturosos brazos