lunes, 25 de octubre de 2021

LA OMISIÓN

 



Quiso pintar la noche pero la luna le estorbaba. Era grande, redonda y su luz teñía fuertemente la negrura. Había esperado tanto, tal vez años, aquella frescura salida de un vapor oscuro poblado de mínimos ruidos orquestales, metidos en sus oleos negros. Además, ni una nube, ni vestigio de neblina había esperado regocijado ¡Y se le cumplió!, sin embargo, una equivocación equinoccial obro en contra de su deseo de captar lo jamás plasmado por nadie. Lo ataba una fecha personal indeclinable.

Luego de meditar creyó encontrar una solución justa. Nunca habíase pintado una obra en donde la noche luciera su atuendo absoluto, su cuerpo perfecto. A toda la gente le maravilló aquel resultado. El mundo de la cultura estaba conmovido. Su cuadro fue exhibido en los lugares importantes de las artes plásticas. El planeta se arrodillaba ante tan magnificente resultado. Borró la luna.