jueves, 25 de abril de 2019

ESTAMOS




al Presidente Nicolás Maduro Moros
el Hombre de la Paz

Por esto hemos rasguñado el universo
Quizás el meteorito que esperábamos
La tempestad que nos anatemiza

Donde la realidad sigue siendo maestra
Donde los sueños son duendes traviesos
Donde la gloria erige sacrificios
Vivir

Estamos
Sobre el meteorito esperado
Comprendiendo su caída

Algunos creyeron que el camino
es la cabeza del avestruz

Que la historia puede vivir
sólo de saltitos en las calzadas

Que el hombro de los imperios
es repisa para echar sahumerios

Que la resistencia es zanquear
los centavillos del futuro arrepentimiento

Estamos
Dentro de la tempestad que nos anatemiza

Quienes se han comido las verdes
vimos un terremoto en el labio imperial
un mar agrio rodar del ojo oligarca
la flama encandilente cegándonos

Estamos
En la que nos viene

Dicen que Bolívar en la oscurana siete de marzo
Buscaba los consejos de Hipólita en su raíz

Dicen que Chávez bajó con abuelos
abriendo penumbras por la calle de mi pueblo

Dicen que Alí rasgaba su cuatro en un jardín
abrazándolo como a un fusil frente a la luna oculta

Vieron a la Patria con los ojos más abiertos
con el pueblo más atento
con los pasos más despiertos


"EL BEBE" SENDIC



"Y quiero que me perdonen en este día los muertos de mi felicidad"
Silvio Rodríguez
A 30 años de su siembra

Era del campo y regresó al campo desde la ciudad a reencontrarse con las luchas de sus hermanos y hermanas trabajadores que siempre fueron sus luchas. Los defendió con su palabra, con sus pasos, con sus saberes, con sus manos, con su sangre. Aquellas esperanzas que se levantaban como inmensos árboles llenaron su mirada de victorias. Aquellas manos eran sus manos. Aquellas voces eran sus voces. Aquellas historias eran su historia. Aquellas vidas eran su vida. Y abrió surcos de lucha organizada en la memoria de su pueblo.