BORINQUEN SIEMPRE AL SON DE LOS PUEBLOS

a Ligia Rojas

venezolana

militante comunista

amante de la independencia de Borinquen

En la antigüedad de nuestro Abya Yala, el Mar Caribe estaba poblado de seres maravillosos nombrados como el pueblo de los Taínos, cuyo significado es: Buenos o Bondadosos. Se dice que venían del territorio norte de lo que hoy se llama Venezuela desde el río Orinoco hacia las islas de Cuba, Haití, Quisqueya y Borinquen, 600 años antes de la era de Jesús. Su establecimiento en aquellas tierras hizo que su vida fuera amable, fructífera, provechosa, siempre en relación armónica con la naturaleza. Hasta la llegada del invasor europeo, los Taínos se destacaron como practicantes de la recreación y del deporte, así como de la escultura, alfarería, tejidos y la agricultura. Eran hombres y mujeres valientes, frontales, de palabra. Fueron los primeros en conocer a los europeos venidos de las Españas, y los primeros en sufrir un vicio que los Taínos desconocían: la traición.

MONUMENTO

Poblada de Taínos nació Borinquen: tierra de valientes. Su resistencia ante el invasor europeo le acarreó terribles consecuencias. Hombres y destacadas mujeres como Guayervas y Anakaona formaron parte de la guerra por la resistencia a la invasión, hasta caer bajo las traiciones, crueldades, animales amaestrados y armas metálicas de los europeos. La tierra fue esclavizada y colonizada por el reino de España que comerció esclavos y esclavas del África negra cuando se materializó el total exterminio del pueblo taíno, quienes rindieron sus tierras no sin antes pelear hasta morir. De esta imposición despiadada, a la isla Borinquen le dan el nombre colonizado de Puerto Rico en el año 1508 y asume como gobernador un tal Juan Ponce de León en nombre de la corona española, cuyo Rey decide destinar esta posesión territorial como tránsito para el comercio de esclavos y el tráfico de mercancías, no sin antes imponer el monocultivo de la caña de azúcar.

ESCULTURA

Durante siglos posteriores, se suceden constantes rebeliones de los esclavos africanos y de un sector de la población que animaba una conciencia independentista desarrollada en espacios importantes de la sociedad. Borinquen usurpada, pasa a ser un importante negocio para varias vías comerciales internacionales de los reinos de España y Portugal, además de su significativa posición geoestratégica en el Mar Caribe. A mediados del siglo XIX grupos ligados a la producción alientan los ánimos por la independencia de España, inspirados en los movimientos triunfantes en la isla de Quisqueya y las nuevas patrias al norte y sur del Abya Yala, insurgen con el llamado Grito de Lares (1868) heroica insurrección que contribuye a ahondar la crisis definitiva del colonizador español, del cual emana el decreto de abolición de la esclavitud y un acuerdo de autonomía (1897) que les permitía su propio gobierno; parecía que se acercaba la hora de la libertad para Borinquen pero no fue así. En el provecho de la guerra contra España, el gobierno de los Estados Unidos (EEUU) ocupó militarmente a Borinquen (1898) y hunde mucho más la espada de la colonización. Con distintos disfraces formales como el de “estado libre asociado” (1952) es hoy Borinquen, una colonia del gobierno de los Estados Unidos.

EL CACIQUE CAONABO Y LA INDIA ANAKAONA EN EL ATAQUE A NAVIDAD

Ha resistido el pueblo borincano a la colonización. Héroes, heroinas y mártires de este proceso de resistencia por la independencia como Eugenio María de Hostos, filósofo, educador, jurista e incansable impulsor de la independencia; Pedro Albizu Campos (uno de los fundadores del Partido Comunista de Puerto Rico) quien denunció la utilización de ciudadanos boricuas para experimentos entre otras discriminaciones y perversidades; como Lolita Lebrón quien lideró el asalto a la Cámara de Representantes de EEUU el 1° de marzo de 1954 junto a Rafael Cancel Miranda, Irving Flores y Andrés Figueroa Cordero para llamar la atención del mundo acerca de la causa boricua y denunciar la farsa de la concesión de nacionalidad estadounidense al pueblo, como un ardid para imponer su participación en las guerras propiciadas por EEUU; como Filiberto Ojeda Ríos quien fuera líder fundador del Ejército Popular Boricua (Los Macheteros) militante revolucionario de larga trayectoria de enfrentamiento contra el enemigo colonizador imperial; y así muchas y muchos boricuas que ayer y hoy elevaron y levantan las banderas de la independencia.

En este momento las calles de Borinquen están llenas de pueblo. Un reclamo cívico, una indignación política, una denuncia administrativa sirven de flama a la hoguera de la protesta popular extendida en toda la isla, como señales de que ya bastan siglos de humillaciones, de subestimación, de impotencia. Este flujo político nos anima a pensar que la autodeterminación e independencia de esta tierra de hombres y mujeres en lucha, darán nuevos pasos de conciencia, en la valía de un pueblo que en todo tiempo ha enarbolado decoro y dignidad al fuerte viento de libertad de todo el Abya Yala. Borinquen siempre ha ido al son de los pueblos, máxime cuando se ha tratado de enfrentar sus adversidades, la colonización de variado rostro que se le ha impuesto, en resistencia por la libertad de la Patria. Cuando un pueblo lucha para sí, lucha por los demás pueblos y hoy, de nuevo, con el imborrable pasado Taíno que la reivindica, Borinquen lo está demostrando con cantos de resistencia y victoria.