lunes, 11 de febrero de 2019

LAS MUÑECAS DE ZOBEYDA EN LA TRINCHERA



Dedicado a Zobeyda Jiménez la Muñequera de Píritu Portuguesa,
a los 7 años de su nacimiento y siembra.
En celebración de la entrada número 300 de La Guarida del Druida.



En pie de lucha las muñecas de Zobeyda. Subversivas como ella las concibió, andan movilizadas a toda tierra en nuestra Venezuela amenazada. Se les ve en casas culturales, en universidades, en escuelas, en ventorrillos artesanales, en manos de abuelas y madres, en brazos de niñas y niños que las confirman en favor de la paz, la democracia, la libertad, la independencia, la soberanía.


Antimperialistas son. Conforman un ejército de trapo, hilos, botones, colores, bondad. Son una guerrilla amorosa repartida en cada grano de tierra de esta Venezuela en resistencia contra los imperios. Palpitan en los corazones de quienes convocaron dedos y manos y sonrisas y sueños, para que defendieran a la Patria de Bolívar y Manuelita llegado el momento.

Cargadas van con las armas del amor. Arcos y flechas de cariño para los amantes guardan a montón y así flechar sus almas hasta el infinito. Balas de polen tienen en sus rifles de pétalos de cayenas para herir las congojas de los espíritus amargados. Los gritos de batalla son graznidos de gaviotas y pelícanos cuando vuelan sobre la espuma de un mar bravío; son barruntar de un elefante de terciopelo gris preparado a incluir su fuerza en la refriega sobre la cuna infantil; son ladridos de perros callejeros, maullar de gatos nocturnos y cantar invencible de grillos, sapitos y ranas; son los ensordecedores silencios de nuestros héroes y heroínas aguardando tras las sombras.

A la vanguardia va cual coronela Eusebia, eterna compañera de Zobeyda, pañoleta a la frente, terribles besos asaltados en sus labios de témpera rojo, cota de tafetán, falda de flores carrubias llamando a resistir al intruso imperial venido de cualquier arrogancia. Allí estará con cañón de hojas de maíz, fuego de harina de yuca, bola de casabe. Desde ya, son mediadoras en Nueva Orleans con los inventores del Jazz y otras maravillas; con los militantes del grupo Panteras Negras y su corazón negro libertario. Fueron a las Españas adonde Federico y su muñeca para cantar los versos de Machado, Alberti y Miguel Hernández. Llamaron a Edith Piaf en Francia con perfumes de azahar para levantar aquella voz de temblar la tierra y los escenarios en contra de la guerra. Fueron llevadas por Antonio Gramsci a la encantadora Italia para cantar el Obela Chao en la Fontana de Trevi. 

En cada pueblo del Abya Yala, desde Alaska a la Patagonia, hay una embajadora muñeca para llamar a la gran tierra en la canción de Alí Primera en pie de Paz. Con el Violín de Becho de Zitarrosa un concierto en Imataca; con el morral de Santiago Maldonado una clase de escuela memoriosa; con la risa irreductible de Milagro Sala una caminata hasta la injusta reja que la encierra; con los Sin Tierra del Brasil vegetal aromando tilos y marchas; con Neruda y Violeta y todo el Chile cobrizo a punta de cueca alegrísima; con la oración cósmica de Cardenal atizando la fogata hermanada; con la potencia imperecedera de Patricio Lumumba. Todos nuestros pueblos de la Pachamama levantados en pie de sueños para empujar las últimas crepitaciones del derrumbado imperio que se descalabra al fondo, de un pantano de caída sin fin.

En la gran fiesta estarán bailando las muñecas de Reverón, de Aquiles y las guayunkeras, repartiendo tizanas de la victoria a nuestros soldados y milicianos de la emancipación. Convocadas las matriuskas de Ekaterimburgo, las chinas de porcelana harán de anfitrionas de las venidas de Europa, Asia y África. En las calles habrá un deslave de papelillos, una avalancha de arepas, de pan de trigo, chica andina, avena en canela y los alimentos producidos por el sudor patrio. “Este bochinche será eterno” -anuncia Zobeyda desde una tarima con Eusebia en los aires del cielo.


1 comentario:

  1. Excelente escrito!!! Recordando a zobeyda y su mágico hogar en portuguesa. Gracias por hacerme recordar!

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